Beber café con leche es una de las prácticas más comunes a la hora del desayuno, o la compañía de tu merienda favorita, y varía en diferentes formas y proporciones, dependiendo de las costumbres de cada lugar.
Por ello, te contamos 5 maneras de preparar café con leche que quizá desconocías:
FRAPPE TIPO CAPUCCINO
Para los amantes de los helados, ¡esta bebida les va a encantar!
Primero debes preparar tu café y cuando esté listo, viertes leche con el 40% de la proporción de tu café, después lo mezclas con el azúcar o endulzante de tu gusto, es importante que la preparación esté pasada de dulce, Recuerda que es un granizado y debe mantener su sabor mayormente dulce.
Después viertes la preparación en un una licuadora con 5 a 10 cubos de hielo, y lo comienzas a licuar, hasta que se cree una textura de Granizado.
¡Y listo!
Si aún deseas jugar con el sabor de tu Frappe, puedes mezclarlo con chocolate líquido, galletas mini chips, esencia de vainilla, leche condensada, canela o chocolate en polvo… Todo está en tu creatividad.
LATTE MACHIATO
Latte Machiato en italiano deduce “leche manchada”, y es por la forma peculiar de prepararlo:
Primero se sirve la leche espumosa y caliente y se deja reposar en el fondo del vaso.
Luego se vierte el café, que se va filtrando a través de ella para crear sus características capas.
Así mismo crearás unas artísticas texturas y colores que enamorarán a todos.
Disfrútalo desde casa y sorprende a tus invitados.
CAFÉ BOMBÓN
Si te encanta la dulzura de la leche condensada, esta preparación es para ti…
Se sirve usualmente en un espresso, y en una taza o un vaso de cristal, que permite ver claramente la separación entre el café y la leche condensada, la cual, es servida de inmediato se vierte el espresso en el recipiente.
Una deliciosa y cremosa combinación de sabores, perfectos para degustar con el postre.
LATTE CARAMELO
Suave, dulce y diferente, una opción perfecta para cualquier momento del día.
Es una equilibrada combinación de sabores y texturas perfecta para los amantes del café.
Se compone de café, leche, azúcar morena y caramelo. Para decorarlo puedes adicionar un toque de crema batida, crocante de algunas almendras y salsa de caramelo.
El resultado es una cremosa combinación de sutiles notas tostadas y edulcoradas que resaltan por encima del carácter amargo del café. ¿Qué más se puede pedir?
FLAT WHITE
El Flat White, nace en los años 80’s, donde los Australianos y Neozalandeses, se cansaron de tomar el capuccino, con espuma, y decidieron pedirlo plano, sin espuma alguna.
Por ello, es catalogado como el café con leche de moda entre los cafeteros de tercera generación, parecido al típico café colombiano llamado “Perico”.
Los baristas discrepan sobre cuál es la receta original, pero la mayoría coinciden en que el Flat White se prepara en una taza de 150 ml con dos shots de espresso y una ligera capa de espuma de leche.
El resultado es similar a un cappuccino, pero menos cremoso y con un sabor a café más intenso.
Con estas fáciles y deliciosas preparaciones, tendrás aún más opciones para enamorar y sorprender a tus invitados o darte un gusto en casa.
Disfruta Café
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